miércoles, 16 de junio de 2010

Que parezca un accidente.-

Por lo visto, eso es lo que recomendaba don Vito Corleone a los suyos: "Que parezca un accidente". Discreción, profesionalidad y que otro cargue con el muerto. Don Vito era hombre inteligente y lo sabía; sabía que no es lo mismo el muerto en un accidente de tráfico – mera estadística en el telediario –, que el activista, tripulante en una flotilla humanitaria, con un tiro en la frente y sobre la cubierta de un barco cargado de sacos de cemento y sillas de ruedas. Vamos, una cuestión de ética, estadística y estética a partes iguales, pero sin confundir churras con merinas. O, como decía el agente 007: Mezclado, no revuelto.
Pero el tal señor Schutz no había caído en ello y se hizo la picha un lío confundiendo ética y estadística, y, encima, sin preocuparse por la estética, con lo bien que quedan maquillados los cadáveres. Que un capo de la Cosa Nostra sea más sutil que un embajador israelí da qué pensar ¿Dónde queda la sutileza diplomática cuando hasta un mafioso puede darle lecciones de savoir faire? A menos que no se trate de descuido – lo de confundir accidentes de carretera y tiro a bocajarro – del señor Schutz, sino de cinismo en estado puro; cinismo sustentado por la impunidad. Pero, bueno, el accidente-incidente de ametrallar cooperantes (¿cuestión de ética o estadística?) ya no da juego periodístico, aunque, precisamente por eso, lo saco a colación en esta bitácora. Porque un no quiere tener “memoria de pez”, como alguna vez nos recuerda Rosa Artal en su blog.
Ahora, al público en general ya no le interesa lo de romper el bloqueo de Gaza: agua pasada no mueve molino. Ahora nuestra preocupación es otra. Estamos demasiado preocupados por ver los partidos del Mundial de Fútbol de Sudáfrica. Lo cual a mí me sigue pareciendo un accidente, aunque quizás no lo sea. Que el mundial futbolero coincida con el enorme recorte de logros sociales en aras de las Leyes de Mercado; que haya más gente ante el televisor del bar de la esquina que en la huelga de funcionarios del otro día, parece casualidad. Algo puramente accidental, como los muertos de don Vito.
Digo yo que debe ser cosa accidental – seguro que lo es – el haber olvidado el terremoto de Haití. Ese terremoto que aniquiló las escasas y defic
ientes estructuras del estado haitiano y que se llevó por delante más de doscientas mil vidas. Accidentalmente - claro está -, estaba yo leyendo la otra tarde el boletín de Médicos Sin Fronteras y me hicieron recordar que se amputaron brazos y piernas aprisionadas entre los escombros, para liberar a los atrapados. Una cirugía de serrucho en hospital de sangre que ha dejado un buen surtido de mutilados a los que nadie recuerda ya. Y, como no hay perro flaco que no esté comido de pulgas, apenas hay hospitales donde atender a tanto cojo y manco. Pero, bueno, ya se sabe cómo son estas cosas: siempre hay un nuevo tsunami a mano, o cualquier otra desgracia colectiva que obligue a liar el petate y olvidar viejas miserias que ya no son objeto de telediario o primera plana.
También parece un accidente lo de BP y su plataforma petrolífera Deepwater Horizon en el Golfo de Méjico, manando, no leche y miel como la Tierra Prometida por Yahvé a los paisanos del señor Schutz, sino pura mierda en forma de nafta. Y uno, que tiene la mala costumbre de leer cualquier cosa que le caiga a mano, ha leído un interesante artículo en el Nouvel Observateur del que parece desprenderse que, aunque parezca un accidente, como los recomendados por don Vito a su gente, no lo es.
No es accidente, sino desidia, incompetencia y corrupción. Accidente que, por otra parte no parece preocupar a los directivos de BP, aunque le cuesta a la petrolera 16 millones de dólares diarios. Porque, aunque le llegase a costar 14 mil millones en total – según he leído –, no le representaría más que los beneficios de un año. “Hilillos” a la mar.
Desregulación de los sistemas de seguridad desde los tiempos del nefasto Bush junior. Minerals Management Service, agencia estatal responsable de aplicar la reglamentación y hacer las inspecciones, ha anulado desde 2004 la obligación de instalar un telemando que bloquea las perforaciones en caso catástrofe, debido a que considera “se trata de sucesos raros y de corta duración”. Sin embargo, Noruega equipa sus pozos con este dispositivo desde 1993, Brasil desde 2007. Argumentaba BP que los programas “voluntarios” de autocontrol eran más que suficientes y que la Administración americana no debía reglamentar con tanta rigidez las inspecciones de sus platafo
rmas. Algo así como dejar en libertad al zorro dentro del gallinero; ya decidirá él cuántas gallinas se come. Ejemplo de autorregulación modelo BP: dos refinerías de BP representan el 97% total de las violaciones de seguridad constatadas a lo largo de tres años en USA por la agencia que las supervisa. Y eso que un tercio de los empleados de MMS, entre 2002 y 2006, han recibido gratificaciones e invitaciones de empresa… Más aún, el lobby del gas y del petróleo ha ingresado 334 millones de dólares en las cuentas de los candidatos y partidos norteamericanos; tres cuartas partes de los cuales han ido a parar a los republicanos.
En fin, un accidente que ya casi ni sale en los telediarios. Como aquello nos pilla tan lejos… Ya verás qué risa el día que la corriente del golfo nos traiga los “hilillos” de BP hasta las bateas mejilloneras de Galicia.
Para terminar: El mundo debe saber que no se trata más que de un accidente aislado, ha comentado un tal Tyler Verdom, de Bilmore Capital. Eso es llamar a las cosas por su nombre.
Don Vito Corleone estaría satisfecho.

8 comentarios:

  1. Que ya ni se molesten en que "parezca un accidente" es uno de los aspectos más preocupantes de la situación actual. Han ido probando y han visto que, hagan lo que hagan, la sociedad no reacciona. Claro que está educada para ello.

    Rosa

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  2. Rufino Marcos Pereira17 de junio de 2010, 19:05

    Hablando de accidentes y de "memoria de pez", echo en falta al admirado (por algunos, ojo, no digo que por usted) Pepe Luis Rodríguez Zapatero y el atentado de Barajas. ¡Qué! Ya ve que no hay que salir al extranjero para tener el mayor ejemplo de desvergüenza en la materia.
    Saludos

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  3. James Bond (el verdadero)17 de junio de 2010, 19:13

    Oiga, perdone, que yo nunca dije eso de "mezclado, no revuelto"... dije "shaken, not stirred" o "agitado, no revuelto" en su lengua. Si me vuelve a poner palabras en mi boca que yo no he dicho, le demando. Y hago que parezca un accidente, que yo tengo licencia.

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  4. ¿No le revienta a usted que tipos como Anjelina Jolie o Brad Pitt hayan hecho más por Haiti que nosotros dos y todos los improbables juntos?

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  5. Hombre, don James, no se me ponga usted así. Piense que soy un jubilata de los que estudiaban francés en el bachiller.
    Tranquilo ¿eh? No se me agite...

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  6. Doctor Joaquín No18 de junio de 2010, 9:15

    Me temo que el señor Bond se equivoca de nuevo. "Shaken, not stirred" no quiere decir "agitado, no revuelto": es "batido, no agitado". Si lo dice Wikipedia es que es así porque, ya saben, en internet no se miente. Saludos, amigo.

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  7. "...han visto que, hagan lo que hagan, la sociedad no reacciona. Claro que está educada para ello."
    ¡Cuánto me gustaría que "anónimo" nos contara a que sociedad se refiere y a quiénes la educaron así! ¿Estamos hablando del mundo o de España? Me da que los responsables son Reagan y Thatcher, por un lado, y el Bigotillo por otro, ¿no? Pero cómo no os cansáis ya...

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  8. Juan José: Es un placer sus comentarios sobre las noticias actuales de una manera tan simpatica y diferente a como nos las cuentan otros medios. Estoy cada día esperando su noticiero. Muchas gracias.

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